lunes, 17 de noviembre de 2008

¿NAVARRA?

Al hilo de la entrada de ayer, en que se hablaba y exponía a su buen criterio, improbable lector, el escudo de la ciudad de Almería, se desea llamar su atención sobre un aspecto de dichas armas:

Resulta extraño, a nuestro parecer, el diseño de las que, se pretende, sean las armas de Navarra en el reinado de García Ramírez IV, disponiendo un águila de sable en campo de oro.Los reyes de Navarra, como ya se explicó, portaron tradicionalmente un escudo de gules pleno. A menudo blocado como refuerzo, de ahí las llamadas cadenas de la actual Navarra, que no son tales cadenas, son una simple bloca, un refuerzo no heráldico. La fábula de la ruptura de las cadenas en las Navas, como recordará improbable lector, no es más que un poético cuento, muy gráfico y didáctico pero fabulación absoluta.

Es verdad que el rey don Sancho VII, desoyendo su estricta herencia armera, añadió al escudo recibido como legado, al escudo de gules pleno, un águila de sable, según la costumbre, hasta hace bien poco vigente, que consideraba el sable, al igual que el púrpura, tanto metal como color. Recuerde las armas del cardenal Wojtyla:Todos estos detalles se explicaron ya en este tedioso blog, en febrero y en junio.

Pero las armas que aparecen en la bordura de las armas de Almería, que representan un águila de sable en campo de oro,no son, en ningún caso, las armas de rey alguno de Navarra. Más podrían identificarse en estos reinos que hoy son España, bien con el águila del Sacro Imperio, bien con las armas que trajo a la casa real de León y Castilla la reina doña Beatriz de Suabia, esposa de san Fernando III.