SÁBADO:IMÁGENES

Los cuentos, en España, comienzan con un indeterminado Había una vez, hace mucho, mucho tiempo... 

Y es que efectivamente hace mucho tiempo, nada menos que en 2007, se expuso someramente en este tedioso blog la pervivencia de la Orden teutónica, recuerdo aún vigente de aquella misma que fuera el origen del reino de Prusia y, en última instancia, del imperio alemán.

 Hoy, que es sábado, y no he recibido más documentos, que me hubiera visto obligado a exponer en cumplimiento de la sugerencia del coronel del cuerpo jurídico que me recordó que el verdadero valor del blog no eran las insensateces que yo mismo iba redactando sino las aportaciones del resto, solamente se expondrán unas imágenes. Imágenes que recuerdan la vigencia de la Orden teutónica a través de su superior, el abad mitrado Bruno Platter, quien es elegido en votación secreta entre los monjes que la orden aún mantiene.

Las armas de este superior jerárquico de los teutones, cuarteladas con las de la propia orden, según inveterada costumbre, recuerdan vivamente aquellas del príncipe Valiente, el caballo de gules en campo de plata, que Valiant portaba en sus aventuras entre los caballeros de la mesa redonda.

Se ha expuesto esa analogía, improbable lector, dado que si se atreve con la lectura de este tedioso blog es persona cultivada y en consecuencia estoy convencido de que aún mantiene su predilección por el mejor cómic de la historia.

Las imágenes que hoy se proponen no pretenden nada, más allá del recuerdo de la existencia de una orden que, en estos reinos, no es tenida en consideración por ausencia de caballeros y que, sin embargo, aún pervive, según nos recuerda el barón de Gavín en una de sus excelentes obras.