La corona imperial, al contrario que la corona real, es un objeto que existe realmente. Se conserva en Viena.
Como podrá observar, improbable lector, se trata de un tocado que recuerda vivamente una mitra episcopal, pero puesta de lado.
Ésta corona imperial aparece en nuestro escudo nacional timbrando la figura de una de las acoladas columnas de Hércules.El escudo nacional está regulado jurídicamente a través de: La ley 33/1981, de 5 de octubre, definitoria del Escudo de España;
el Real Decreto 2267/1982, de 3 de septiembre, en el que se especifican técnicamente los colores del escudo.
Este cuerpo jurídico, suponemos que por error del legislador, establece que la corona imperial que timbra la columna diestra del escudo de España tiene su estructura superior, su pieza en forma de mitra, de color gules. 
Es decir, la corona imperial del escudo de España no es, como sería lógico dibujarla, atendiendo al modelo existente realmente, de éste modo, 
sino de éste otro, 
con la parte que le otorga su especial forma de mitra esmaltada de gules, no de oro. Pudiendo definirse en consecuencia esta corona como corona imperial española, dado su especial diseño.
Este cuerpo jurídico, suponemos que por error del legislador, establece que la corona imperial que timbra la columna diestra del escudo de España tiene su estructura superior, su pieza en forma de mitra, de color gules. Es decir, la corona imperial del escudo de España no es, como sería lógico dibujarla, atendiendo al modelo existente realmente, de éste modo, sino de éste otro, con la parte que le otorga su especial forma de mitra esmaltada de gules, no de oro. Pudiendo definirse en consecuencia esta corona como corona imperial española, dado su especial diseño. 
