sábado, 27 de noviembre de 2010

XXXV PRIMEROS AÑOS DE REINADO

Tal día como hoy, veintisiete de noviembre, en la iglesia de san Jerónimo, tan vinculada a nuestros reyes,
 hace ya treinta y cinco años, accedía a la corona de España nuestro actual monarca, felizmente reinante, don Juan Carlos, I de su nombre.
Se trata del primer monarca que en estos reinos que son España adoptó un nombre compuesto, para evitar el conflicto de numeración con su padre, el almirante don Juan de Borbón.
Felicidades a su majestad, y a todos los españoles, por estos primeros treinta y cinco años de sabiduría y sensatez en tal alta institución.

NUEVOS INGRESOS EN LA HERMANDAD DE SAN FERNANDO


Hoy, veintisiete de noviembre de 2010, se cumple el primer aniversario de la ceremonia de mi admisión en la orden de caballería, a través de la Real hermandad de caballeros de san Fernando. Se propone una breve anécdota.Es la relativa a la ceremonia de recepción en la orden de la caballería, que fuera tradicional en Castilla y León para significar la madurez o el acceso al poder de los reyes. En estos reinos, la mayoría de edad de los hijos de la real familia se alcanzaba en torno a los catorce años. A tal efecto se celebraba, con toda la solemnidad requerida por la ocasión, la ceremonia de admisión en la orden de la caballería  y el consiguiente acceso a la condición de guerrero cristiano del infante real.La recepción en la orden de caballería se desarrollaba con el sabido ritual, cuya parte culminante era el momento en el que se apoyaba la hoja de la espada sobre ambos hombros del caballero al tiempo que se pronunciaban las palabras in hoc signo, dignitatem equestrem obtines, que significan, con este signo obtienes la dignidad de caballero, añadiéndose después el sabido: Que Dios y el apóstol Santiago os hagan buen caballero.Para realizar esta ceremonia, que era habitual entre todos los caballeros, no solo en el ámbito de la real familia, se requería siempre a otro caballero de más dignidad, o edad, o sabiduría, que era quien transmitía la orden de caballería. Pero, ¿quién hacía caballero al rey? ¿quien podía, entonces como hoy, considerarse por encima del rey?Para solventar esta cuestión, el ingenio medieval castellano fabricó una estatua de madera del apóstol Santiago, sedente, portando una espada. Esta imagen, a través de un mecanismo interior, permitía manipular el brazo derecho para dejar caer la espada de la estatua sobre los hombros del rey.Tal día como hoy, veintisiete de noviembre, en 1217, en el monasterio de las Huelgas de Burgos, el rey san Fernando, todavía soberano solo de Castilla, fue aceptado como rey, entronizado, por medio de la ceremonia de recepción en la orden de la caballería. Orden que recibió de manos de la estatua de Santiago que, aun hoy en día, puede admirarse en el cenobio burgalés.
En recuerdo de aquella ceremonia y desde hace más de sesenta años, la Real hermandad de caballeros de san Fernando recibe, siempre en esta misma fecha, veintisiete de noviembre, a los nuevos caballeros que ingresan en sus filas.

viernes, 26 de noviembre de 2010

REVISTA RECIBIDA

Es siempre un motivo de agradecimiento recibir cualquier publicación que aborde estos temas nuestros. Especialmente si la calidad del contenido es esmerada.
En efecto, ha llegado a la dirección de correo electrónico asociada a este tedioso blog el último número de Atavis et armis.
El conjunto de la revista es óptimo, pero se desea destacar por su interés el artículo que firma el III marqués de la Floresta sobre la vida y obra del que fuera rey de armas don Gonzalo Lavín del Noval.
Recuerda el texto que don Gonzalo Lavín fue rey de armas desde su nombramiento palaciego el 14 de mayo de 1915 hasta el golpe de Estado incruento de 14 de abril de 1931 y de nuevo desde la recreación de la legislación nobiliaria de 1948 hasta su fallecimiento en 1965.

El artículo adquiere especial interés al hacer exhaustiva mención de las funciones que el decreto de 1915 atribuyó al cuerpo de reyes de armas.
Recuerda además las armas que ostentó don Gonzalo en los documentos que expidió: Un nogal de sinople sumado de una lis de azur, en campo de oro, con bordura de gules cargada de ocho aspas de oro, partido de una banda de oro en campo de gules. Armas que reflejaron sus dos primeros apellidos.

Heráldica además que utilizó en calidad de Juez de armas del capítulo español de la orden lazarista acolando la cruz verde y disponiendo el conjunto sobre manto de sable con vuelta de armiños, creo que indebidamente, y timbrando con la corona oriental que luce la armería lazarista.
Se trata en suma de un excelente artículo, profusamente documentado y, como no podía ser de otra forma, redactado con rigor académico no exento de amenidad.

Es obligado además hacer especial mención de la reseña relativa al encuentro que en el mes de septiembre reunió en la capital lusa a cinco príncipes: don David Bagration, jefe de la casa real de Georgia;
el archiduque de Austria, don Andrés Salvador de Habsburgo-Lorena, príncipe de Bohemia y Toscana, y príncipe de Hungría; el infante don Miguel de Portugal, duque de Viseu; el príncipe don Ermías Selassie, presidente del consejo de la corona de Etiopía; y el príncipe don Osman Rifat Ibrahim, de la casa imperial de Turquía y real de Egipto.
Por último, se exponen las armas que sirven de contraportada a la publicación, ostentadas por don Joaquín Cayuela y Vergés, prior emérito de la orden lazarista, dibujadas por el maestro don Carlos Navarro Gazapo.

jueves, 25 de noviembre de 2010

LOBO COBARDE

La primera vez que, tras años de estudio autodidacta, oí a un erudito hablar sobre heráldica fue en el Ateneo de Madrid. Don Fernando del Arco impartía, con absoluta maestría, un curso que, siendo yo estudiante de económicas, no me fue posible completar.

Hoy don Fernando, que sin duda es uno de los maestros de nuestras ciencias, se dirige a esta tribuna para exponer una idea:

EL LOBO COBARDE


Estimado José Juan:

…El título del asunto se debe a que, revisando el capítulo de Heráldica de la obra Arquitectura Medieval de Violet le Duc, al observar el diseño del lobo "con rabo curvado hacia abajo" he recordado el escudo que atribuye el dibujante Heralder a don Jaime de Marichalar expuesto en tu entrada del 14 de noviembre.

Violet le Duc blasona esa figura como lobo vilenado.
También acostumbra a representarlo de esa forma el dibujante de tema heráldicos y publicista: J.A. Schniper.

…Un fuerte abrazo de: Fdelarco.


AGRADECIMIENTO

MUY AGRADECIDOS
POR LAS AFECTUOSAS PALABRAS DE PESAR Y ORACIONES
EN LA MUERTE DE SU PADRE Y ABUELO
EL SR. VIZCONDE DE AYALA

LOS MARQUESES DE LA FLORESTA
DUQUES DE OSTUNI

LUIS DE CEBALLOS-ESCALERA Y GILA

RAFAEL DE CEBALLOS-ESCALERA Y GILA
ROCÍO MARTÍNEZ CUNHA

y

Angelina de Ceballos-Escalera y Moyano
Antonio de Ceballos-Escalera y Moyano
Ignacio de Ceballos-Escalera y Moyano
María Teresa de Ceballos-Escalera y Moyano
Ramiro de Ceballos-Escalera y Jofre
Isabel de Ceballos-Escalera y Jofre

Mariana de Ceballos-Escalera e Hicks-Mudd

Rafael de Ceballos-Escalera y Martínez
Santiago de Ceballos-Escalera y Martínez
Pablo de Ceballos-Escalera y Martínez

BÁCULO CASTRENSE III


Escribe unas líneas el sacerdote perteneciente al vicariato castrense, viejo conocido de estos pagos, don Miguel Ángel García de Arteaga. En su mensaje aborda la reciente cuestión sobre el báculo episcopal que utiliza el actual ordinario castrense.

Estimado compañero:

Le escribo en referencia a la entrada del 20 de noviembre de 2010 en la que Don Álvaro Zapata se pregunta por el báculo de Monseñor del Río Martín, Arzobispo Castrense de España.

Debo aclarar que en realidad el báculo no es del actual Arzobispo Castrense. Perteneció a Monseñor Alonso Muñoyerro, que fue Vicario General Castrense del 17 de diciembre de 1950 hasta que falleció en la madrugada del lunes 23 de septiembre de 1968. Es de suponer que ese báculo se lo regalaron a Don Luis Alonso Muñoyerro con ocasión de sus bodas de oro sacerdotales, como también es de suponer que las armas que aparecen en el mismo le pertenecen a él.
El báculo se conserva en la Iglesia Arzobispal de la Fuerzas Armadas de España (C/ Sacramento, 11 Madrid).

Lamento no poder dar más explicaciones al respecto, pero de momento esta es toda la información que poseo.

Un cordial saludo.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

DISEÑO HERÁLDICO

Hoy se propone el excepcional trabajo de don Juan Fernández Molina, compañero de armas y heraldista con blog propio en el que va mostrando parte de sus diseños.
Don Juan ha tenido la gentileza de plasmar en un pergamino un dibujo con mis armas, reflejadas según su propio e inconfundible estilo personal. Se trata sin duda de una obra maestra: 

APORTACIÓN: BÁCULO EPISCOPAL CASTRENSE II

Estimado Don José Juan:

En relación a su entrada de ayer, 20 de noviembre, se trata de las armas de monseñor Luis Alonso-Muñoyerro.
En la inscripción "1-1-1913 1-1-1963" se adivina un cincuentenario, probablemente de ordenación sacerdotal. Al tener capelo de arzobispo y estar rodeado de las símbolos de los distintos ejércitos -tierra, mar y aire-, supuse que habría de ser el Arzobispo castrense de entonces -1963-. Y descubrí que se trataba del doctor Luis Alonso-Muñoyerro.
Al buscar sobre monseñor Alonso-Muñoyerro en enero de 1963, encontré esta interesantísima nota de prensa, que confirma mi hipótesis:

Dice así:

HOMENAJE DEL CLERO CASTRENSE AL ARZOBISPO DE SION

Pasado mañana, sábado, se celebrará en la iglesia de San Francisco el Grande, a las once de la mañana, un solemne pontifical, que será oficiado por D. Luis Alonso Muñoyerro, arzobispo de Sión y vicario general castrense.

Después de haber sido distinguido con la concesión de la Gran Cruz de la Orden del Mérito Militar, que el ministro del Ejército le impuso personalmente el día de la Pascua militar, este acto será como el centro de cuantos forman el programa con que el clero castrense y las Fuerzas Armadas de los Ejércitos de Tierra, Mar y Aire honran a su vicario general castrense en sus bodas de oro sacerdotales.

En el ofertorio de la misa será entregado al vicario general castrense un báculo artísticamente elaborado, en el que figuran las insignias de los Cuerpos Eclesiásticos Castrenses y las Patronas de los Ejércitos de Tierra, Mar y Aire, como obsequio del clero castrense a su prelado.

Al final del acto, monseñor Muñoyerro impartirá la bendición papal.

Otra cosa que llama mi atención es el primer cuartel, en el que adivino el escudo de la familia Alonso, de Cangas de Onís y de Avilés, que muchas veces suelen presentar como "el escudo del apellido Alonso".

Desconozco si monseñor Alonso-Muñoyerro participaba de esa familia, o si adoptó ese cuartel por dicha asociación tradicional entre escudo y apellido, como ha pasado, por ejemplo, con las armas de la princesa de Asturias.

Un afectuoso saludo.
José Andrés Navarro Yepes

martes, 23 de noviembre de 2010

BRILLANTE APORTACIÓN DE DON JOSÉ ANTONIO VIVAR DEL RIEGO


Estimado José Juan:

En relación con la cuestión, planteada por el Sr. Zapata, de las armas que adornan el báculo ostentado por el actual arzobispo castrense D. Juan del Río Martín,
puedo aclararte que se corresponden al primer titular de esta sede, D. Luis Alonso Muñoyerro, quien la ocupó desde su creación en 1950 y hasta el año 1968. Anteriormente, y desde 1944, había sido titular de la sede episcopal de Sigüenza.

Si bien siempre he encontrado el apellido de este prelado escrito como "Muñoyerro", creo que se trata de la contracción de los apellidos Muñoz y Yerro. De hecho he encontrado referencia a su madre como "Teresa Muño-Yerro Cuenca", y en el escudo que te envío se pueden encontrar armas atribuibles a estos linajes.
En concreto, el segundo cuartel contiene en primer lugar un cuartelado: 1º y 4º, de oro, una cruz floreteada, de gules, y 2º y 3º, de oro, tres fajas de gules; bordura de gules con una cadena de plata (Muñoz). Y en segundo lugar un partido: 1º, de oro, cortado por una faja de sable cargada de tres flores de lis de plata, en la parte superior un hierro de lanza en banda, y en la inferior, un castillo de azur sobre peñas de lo mismo, y 2º, en plata, un roble de sinople, acostado de dos calderas de sable, una a cada lado (Yerro).
Respecto del primer cuartel, contiene las armas del linaje de Alonso, mientras que los dos últimos se corresponden con escudos atribuibles a los de Morán y Cuenca, segundos apellidos de su padre y de su madre, respectivamente.

El lema episcopal que se adivina bajo el escudo es la frase latina Ut cognoscant Te ("para que Te conozcan"), tomada de Juan, 17, 3.
Adjunto te remito una fotografía de una vidriera existente en Sigüenza en la que se puede apreciar el detalle de las armas, así como un tarjetón armoriado de su consagración episcopal, obtenido de un conocido portal de artículos de coleccionista.

Un cordial saludo:
José Antonio Vivar del Riego

lunes, 22 de noviembre de 2010

APUNTE BIBLIOGRÁFICO

Romualdo Saenz Matienzo: Antropología Histórica de los señores de Tejada y Valdeosera (Las familias más viejas de Europa). 297 páginas. Editorial Dunken, Buenos Aires, 2010. ISBN 978-987-02-4753-I.

Como señala Elena Fernández del Cerro en la presentación de este interesantísimo libro, hace ya muchos años que Abilio Barbero de Aguilera introdujo en España el enfoque antropológico en los estudios históricos, pero no se puede decir que se hayan generalizado las investigaciones en esa línea, en la que se inscribe desde hace décadas el trabajo de Sáenz de Matienzo, que conjuga Historia, Antropología, Genealogía, Heráldica y Nobiliaria en un intento de desvelar los orígenes de los Solares de Tejada y Valdeosera, dos señoríos anómalos, colectivos y hereditarios por línea femenina, reconocidos por Enrique IV en 1460, cuando se estaba imponiendo la figura del mayorazgo transmisible preferentemente por línea de varón, según el esquema sucesorio adoptado, al menos formalmente, desde que Alfonso X promulgara Las Partidas.

Constituye un completo estudio sobre el asunto, sin que ello signifique que resulte exhaustivo ni refrendar la totalidad de sus conclusiones. No parece haber fondo documental en España y América que el autor haya dejado de revisar, desde los archivos de Miranda de Ebro hasta los de Burgos, pasando por Simancas, Valladolid, la Colección Salazar y Castro y un larguísimo etcétera. Resultando interesante todo el libro, son muy notables las novedades que aporta acerca de las genealogías hasta ahora aceptadas de los condes de Aguilar de Inestrillas y de los Arellano, los capítulos dedicados a la refundación literaria del Solar de Valdeosera y la red tejida entre la Inquisición y los solares, así como el estudio acerca de la transmisibilidad de derechos solariegos por línea femenina y la renuncia a su mantenimiento a ultranza para evitar la anulación del privilegio de Enrique IV de 1460.

Trabajo innovador, sugiere otros muchos caminos y métodos de investigación de los habitualmente trillados en tales disciplinas, y, aunque pueda provocar sorpresa y algún escándalo, su lectura enriquecerá a profesionales y aficionados de estas materias y les obligará a formularse interrogantes que hasta ahora no se han planteado los autores, y por ello la recomendamos vivamente a cuantos quieran conocer de verdad las mentalidades y los modos de vida de nuestros antepasados medievales.

domingo, 21 de noviembre de 2010

ESCUDO

Hoy domingo no se expone entrada alguna, improbable lector, porque me he dedicado a dibujar y colorear un escudo de madera para don Fernando Sánchez Rodríguez y doña Marta Gómez Martín, con ocasión de la celebración del cuarenta cumpleaños del primero.

El resultado es el que sigue: