Sus armas inician esta entrada. El profesor don Geza Grosschmid, manifestando una muy singular noción de la estética heráldica, definió que todo escudo debe contener al menos un elemento con esmalte de gules.
Las conversaciones con el profesor Grosschmid fueron estímulo fundamental en el interés por la heráldica eclesiástica para el padre don Guy Selvester.
Nada más.