jueves, 4 de diciembre de 2008

CORONA IMPERIAL Y REAL

Se viene recurriendo a las columnas del escudo de España como tema de recientes entradas. Se ha explicado su origen y su significado. Se ha recordado que, aunque hoy son adornos exteriores, durante un breve tiempo, con José Bonaparte, conformaron un cuartel de las armas de España. Y se ha apuntado la anécdota referida a que las columnas simbolizan hoy el concepto de unidad monetaria si se superponen a una letra.Hoy vienen a colación de nuevo las columnas para hacer referencia a las coronas que, en el escudo nacional, se disponen sobre ellas y a las ondas de agua que sirven de sustentación figurada a la base de las columnas.A buen seguro ha reparado infinidad de veces, improbable lector, en que sobre el capitel de las columnas que se acolan al escudo de España se apoyan dos coronas. Una, que es repetición de la que sirve de timbre al escudo, la corona real, y otra extraña, con apariencia de mitra episcopal puesta de perfil y que es la corona imperial.Estas coronas se dispusieron desde su origen sobre las columnas. Se trata de una ratificación de la significación pretendida con el propio símbolo de las columnas. A través de las coronas sobre las columnas y estas sobre el mar, se significa que esa tierra plus ultra, de más allá de las columnas de Hércules, es un imperio, de ahí la corona imperial, separado del reino, simbolizado por la corona real, por el mar, representado con las ondas de agua que sirven de sustentación a las columnas. Si se detiene a comprobarlo, improbable lector, óbservará que la idea está muy bien resuelta en la composición heráldica del escudo nacional.Se añade, para facilitar la argumentación, que la forma en que los anglosajones denominaron, despectivamente, a sus tierras americanas, usando la voz griega kolonia, que venía a significar que se establecía un núcleo urbano civilizado en un entorno salvaje, en España no se usó. A las tierras españolas en América se les denominó siempre, en su conjunto, como el imperio. Su denominación individual fue la del nombre de cada virreinato o capitanía. Pero entendido como un todo, las tierras sobre las que el rey de España ejercía su soberanía en Amércia se denominaron siempre el imperio.Aceptado este concepto, se manifiesta con más claridad el acierto en la elección del símbolo de las columnas que se timbran con corona real e imperial y que descansan sobre ondas de mar.