sábado, 3 de noviembre de 2007

ARAMBURU CABALLERO

Breve exposición de lo que los varios armoriales que poseo en mi biblioteca hablan sobre los apellidos de nuestros buenos amigos don Carlos Aramburu García de la Mata y su esposa doña Beatriz Caballero Torras. Los dibujos de los escudos los he extraído de la página que recomiendo por su rigor y buen hacer divulgativo: http://www.heraldaria.com/ .

Aramburu: En campo de plata, un roble de sinople y un oso de sable, empinado al tronco.

Si bien los de Navarra, de donde es el padre de don Carlos, traen: Escudo partido: 1º, En campo de azur, un losange grande, de plata, cargado de un castillo de azur, y 2º, losanjado de oro y gules.

García de la Mata: Armas: En campo de gules, dos leones de oro, afrontados. Bordura de gules con ocho aspas de oro. Originario de Logroño y radicado en Barcelona.

Caballero: Aragonés. De Alcañiz (Teruel), desde donde se extendió por Castilla, Asturias y Andalucía. Armas: En gules, un caballero armado, de plata, jinete en un caballo del mismo metal, con una espada desnuda en la mano diestra y una rodela en la siniestra.

Torras: En azur, una ciudad de plata.

COSTUMBRE ESPAÑOLA

En España ha sido tradicional, durante siglos, decorar las paredes de las estancias más nobles de la casa con escudos de madera, en los que se reprentaban las armas del esposo o de la esposa o de ambos.
Es ya dificil ver alguna casa en la que se mantenga esta costumbre. Hoy se considera ostentoso. Como si el adoptar unas armas tuviera algo que ver con la nobleza cuando, como ya se expuso en otras entradas anteriores de este blog, no tiene absolutamente nada que ver. En España, la legislación heráldica admite que cualquier individuo tiene derecho a usar un escudo con sus armas, siempre que no coincidan con las de otro linaje que ya las ostente. Consecuentemente en nada, en nada, se demuestra nobleza o falta de ella, por usar un escudo.

LAS ARMAS DEL PRINCIPE DE ASTURIAS

Con el Real Decreto 281/2001, sobre la creación y uso del estandarte del príncipe de Asturias se produjo una notable indignación entre los entendidos en la materia. Las armas que se definieron para el príncipe se dibujaron de esta forma en el propio BOE:
Recuerdo muy nítidamente haber leído en la biblioteca del Cuartel General del Ejército del Aire, donde se recibe la suscripción, el editorial de la revista Hidalguía correspondiente a esa fecha.
El entonces rey de armas decano, don Vicente de Cadenas y Vicent, se indignaba con dos aspectos de las armas que se creaban para el príncipe:

Primero: Por un lado, y con evidente razón, con la forma del escusón: Ovalado.

Este escusón representa las armas de la dinastía reinante: Borbón-Anjou. Y es ovalado porque nadie se ha molestado en modificarlo desde que se dispusiera esta forma para la, entonces, reina de España doña Isabel II.
Como sabe, improbable lector, la forma ovalada es mas propia de mujeres que de hombres. Así ha sido siempre y no se entiende esta forma en el centro de nuestro escudo, cuando la dinastía reinante no es ocupada por una reina titular.

Tanta razón tenía el ínclito rey de armas que nuestro rey, don Juan Carlos, que Dios guarde, ha modificado su propio estandarte para evitar esa forma propia de hembras, que no de machos. Añado fotografía de baja calidad del estandarte actual del rey, que demuestra que ya se ha corregido el error del escusón:

Segundo: El otro motivo de indignación era el que se dispusiera brisura en las armas del príncipe. En concreto el lambel, con forma medieval. Como sabrá, lector, el lambel es esa "faja" azul, con tres pendientes de igual color que se sobreponen al escudo del príncipe y que impiden ver con plenitud los cuarteles correspondientes a los antiguos reinos de Castilla y de León.


El rey de armas se indignaba y explicaba en su editorial algo evidente: El reino y el rey, comparten las armas. Es cierto. Solo se pueden distinguir por los ornamentos exteriores. También cierto. Y proponía que igual se hiciera con el príncipe: Que ostentara las mismas armas que su padre, el rey, y que el reino, España. Dejando que fuera solo el timbre exterior, la corona, el que aclarara si el escudo pertenecía al rey o al heredero.

Pero no debe ser así. Es mi parecer. El rey y el reino comparten las armas y así debe ser porque como tales se formaron las armas de los reinos: Porque existía un rey, en su momento, que ostentaba esas armas, que luego pasaron a ser de cada uno de los reinos, cuando originalmente y durante siglos, solo representaron a la persona, al rey. Es decir, en la persona del rey de España se dan cita las titularidades de los reinos que hoy conforman España. En consecuencia, como titular de la nación, comparte las armas con la misma.

Observe lector, gráficamente, lo que se expone en relación con que las armas del rey y del reino son las mismas: Las armas del reino, tal como se dibujaron en el BOE al promulgar la Ley 33/81 de 5 de octubre, que describía el escudo de España:
Y las armas del rey don Juan Carlos, que se describen en la Regla número 1, del Título II, del Real Decreto 1511/1977, de 21 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de Banderas y Estandartes, Guiones, Insignias y Distintivos: Y ahora los escudos que hemos visto, sin ornamentos exteriores. Sin coronas, sin columnas y sin toisones:Como explicaba, ambos escudos son uno solo. Seis cuarteles: Castilla, León, Aragón, Navarra y Granada. El sexto es, en el centro, las armas de Francia, que representan las armas de la dinastía Borbón.

Continuo lo que exponía: El heredero no es el rey. No debe tener las mismas armas. Me parece algo evidente. Aunque no debe serlo tanto cuando el tema se discute. A mi humilde juicio los ornamentos exteriores son eso: Exteriores. Ajenos realmente a la heráldica en buena medida. No olvidemos que la heráldica se inició con escudos. Escudos verdaderos. Maderas a las que se daba una forma de almendra y en las que se dibujaban unos símbolos para identificarse. Los ornamentos exteriores son siglos mas jóvenes. En consecuencia el príncipe, que es eso: heredero, pero no rey, debe distinguir su escudo del de la nación y del titular de la misma. Y para hacerlo, añade un lambel a las armas nacionales. Correctísimo a mi juicio. Acertado. De buen gusto. Y además, en vez de escoger ese amanerado lambel moderno, se recurre al lambel medieval. Más explícito. Más extenso. De mejor tono.
En las armas del heredero, el decreto del 2001 timbraba con corona de príncipe: En lugar de ocho diademas que tiene la corona real, de las que solo se ven cinco, se ponen cuatro, de las que solo se ven tres. Correcto. Pero, insisto: El escudo en sí mismo ha de ser diferente. Los ornamentos, nadie lo discute, también.

Añado escudo a color de las armas del príncipe:

Y por último, el escudo del príncipe sin ornamentos exteriores, tal como se podría colgar en su propio palacio, manteniendo esa costumbre tan española de decorar con escudos:

jueves, 1 de noviembre de 2007

CRONISTAS REYES DE ARMAS

Se relataba en este blog, en entrada del día 23 de octubre, que además del rey de armas del que ya se escribió, el marqués de la Floresta, existen otros más en España. Recuerdo brevemente al lector un par de excelentes páginas sobre:
Reyes de armas:
y sobre certificaciones armeras:
Remito al improbable lector a la entrada del día 23 de octubre para que recuerde que, todavía en el año 2007, en pleno siglo XXI, es posible solicitar el registro institucional de armas nuevas a perpetuar a través del linaje. Es decir, que es posible dar en herencia la posesión de armas heráldicas. Para ello se necesita de una autoridad heráldica.
Pues bien esas autoridades heráldicas en España, en materia de armas gentilicias, esto es en el registro de armas para personas, realmente, se resumen en un único individuo, el marqués de la Floresta, don Alfonso de Ceballos-Escalera y Gila.
Pero aunque para armas gentilicias, y a pesar del dictamen contrario del consejo de estado, solo certifica el marqués, para armas de instituciones públicas existen dos cronistas más:
Fray Valentín de la Cruz, carmelita descalzo, que es el cronista oficial de la provincia de Burgos, y como tal aparece nombrado en cuantas concesiones de armas para municipios se publican en el Boletín Oficial de Castilla y León.
Y don Armand de Fluvià y Escorça, que fue nombrado en el Boletín Oficial de la Generalidad de Cataluña del 8 de agosto de 2004, cronista de Cataluña en materia de heráldica, genealogía y vexilología; y aunque, que sepamos, no ha certificado armas gentilicias, el nombramiento incluye la posibilidad de certificaciones a individuos.
No me resisto a añadir de nuevo la certificación de armas expedida por el marqués de la Floresta y avalada por su majestad el rey al Teniente General don Sabino Fernandez Campo, conde de Latores, grande de España:
Añado otra certificación expedida por marqués de la Floresta, expedida a favor de don Eduardo P. Brillantes y Balderas, extraida de wikipedia; posteriormente se añade detalle de la misma:

lunes, 29 de octubre de 2007

MIS ARMAS EN UN SELLO

Mi esposa, doña Arancha Piedrafita, de los Piedrafita de toda la vida de Zaragoza, ha tenido el acierto de encargar y regalarme un sello con mis armas. Es este:

domingo, 28 de octubre de 2007

FORMACIÓN DE ARMAS

Es costumbre, en los Estados Unidos, partir las armas del obispo ordinario con las de su diócesis.

Estas son las armas de la diócesis de Paterson, en el estado de Nueva Jersey:

Y estas las armas que para sí mismo eligió monseñor Serratelli, al ser ordenado obispo:

Por fin, estas son las armas que viene usando monseñor Serratelli mientras está al frente de dicha diócesis: Un partido de la diócesis de Paterson con sus propias armas.

He obtenido estos datos de la página que la diócesis de Paterson mantiene en la red: http://www.patersondiocese.org/page.cfm?Web_ID=1190