jueves, 19 de junio de 2008

PRIMADO I

Con ocasión de la celebración de la festividad del Corpus Christi, se ha celebrado en Toledo, Castilla-La Mancha, la habitual procesión en la que participan los caballeros de las órdenes militares. De entre las muchas fotografías con motivos heráldicos que podrían proponerse, se expone ésta:Se trata de una tela suspendida sobre de una de las calles por las que la custodia hace el recorrido procesional, para servir de parasol. En ella se han reproducido, con muy buen criterio, las armas de un cardenal arzobispo de la sede primada de España: Toledo. No se trata del escudo del actual cardenal, monseñor Cañizares, sino del anterior primado, monseñor Francisco cardenal Álvarez Martínez. En ellas se expone, escrito en letras de sable, sobre un campo de sinople, el lema del papa que le creó obispo, Juan XXIII, además de la cabeza de un báculo, también de sable.

Esta circunstancia, disponer color sobre color, tan evidentemente errónea, no siempre ha resultado tan obviamente incorrecta. Especialmente con el sable, que ha sido tratado, igual que el púrpura, como metal y color. Así, no es extraño ver este color dispuesto sobre otro. Se proponen como ejemplo, además de las armas recién descritas del cardenal Álvarez Martínez, las de Sancho VII de Navarra, de sable sobre gules,y las del cardenal Wojtyla, después Juan Pablo II, de sable sobre azur.
Retornando a las armas del cardenal Álvarez Martínez, del jefe mejor no hablar: Una desafortunada representación de María como Stella Maris, poniendo sobre ondas de agua de plata y azur un estrella también de plata.