Se exponía recientemente que la heráldica centra su estudio en los diferentes elementos que se enmarcan en el interior de la boca de un escudo y en sus adornos exteriores. 
Si no existe boca de escudo no habrá heráldica, sin embargo las imágenes que siguen, tomadas en el recientemente inaugurado centro comercial de Torrelodones, ¿son heráldica?
Si no existe boca de escudo no habrá heráldica, sin embargo las imágenes que siguen, tomadas en el recientemente inaugurado centro comercial de Torrelodones, ¿son heráldica?
Durante el tiempo en el que este tedioso blog que está leyendo, improbable lector, se ha mantenido inactivo ha venido en producirse una alarmante noticia a la que no se ha dado la publicidad debida en el entorno de los espacios virtuales, todos ellos excelentes, que han continuado dando cumplida noticia de cuantos avatares se han producido en el ámbito de nuestras ciencias heroicas.
La reciente declaración de esa masacre como delito de lesa humanidad, de genocidio gubernamental contra cristianos, por parte de las cortes del reino sueco ha llevado a que comiencen los ataques informáticos contra cualesquiera intereses de aquel país.
El enlace, ya restituido a su ser, es este: 
Abundando en la convocatoria 
El Alcalde Mayor del Antiguo e Ilustre Solar de Tejada, corporación que agrupa a los descendientes del linaje, don Guillermo García Hernández, residente en Chile, estuvo representado por la titular de la Alcaldía ordinaria, doña María Ángel Quesada y Zea, que se trasladó ex profeso desde La Rioja a Madrid con este fin, acompañándola el Secretario-Canciller, don Tomás Rubio y Fernández de Tejada, y doña Nuria Quesada y Zea, Diputada por Laguna de Cameros.
En primer lugar, a las 18,30 horas del mencionado día, se celebró una Misa de Acción de Gracias en la Real Basílica de San Francisco el Grande, templo elegido para la ocasión, entre otros motivos, por custodiar una de las más famosas representaciones pictóricas de la Batalla de Clavijo, suceso debatido por los historiadores, que la tradición sitúa cronológicamente en el año 844, y al que se refiere Enrique IV en su Carta de 1460 como punto histórico en el que se resumirían los méritos del linaje recompensados con ese documento acreditativo de su Nobleza y de su escudo de armas.
Ofició la Eucaristía en el Altar Mayor el Reverendo Padre Don Ricardo Gómez de Ortega y Fuente, quien pronunció una inspirada plática.
En primera fila de los bancos situados en la parte izquierda de la nave tomaron asiento la Alcaldesa ordinaria del Solar, el Canciller y doña Nuria Quesada. Junto a los miembros del Solar asistentes, aproximadamente un centenar, tomaron asiento los representantes de las corporaciones nobiliarias afines invitadas, para quienes se reservaron los primeros bancos de la parte derecha de la nave central.
Entre los numerosos asistentes a los actos, más de un centenar, en su mayoría descendientes del linaje de Tejada, es de destacar la presencia de representantes de diferentes corporaciones nobiliarias, de los que reseñamos los siguientes: coronel don José Agustín Puente Casanova, representando a la Real Orden de San Hermenegildo; don José María Moreno de Barreda, en nombre del Subpriorato de San Jorge y Santiago de la Soberana Orden de San Juan de Jerusalén; conde de Santa Ana de las Torres, por la Orden de Santiago y por la Real Maestranza de Caballería de Granada; el Lugarteniente General de la Orden de Montesa, don Rafael de la Brena y Sanchiz; don Javier del Arco Carabias, de la Orden del Santo Sepulcro de Jerusalén; por la Orden Constantiniana de San Jorge, don Amadeo-Martín Rey Cabiesses; el marqués de Heredia, en nombre de la Real Hermandad del Santo Cáliz de Valencia; designado por el Real Cuerpo de la Nobleza de Madrid, don Antonio Pérez de la Mata y Fernández Castrillón; en nombre de la Real Hermandad de los Infanzones de Illescas, don Manuel Piquer Carbó; el conde de Villarreal, Presidente de la Real Asociación Hidalgos de España; la Real Hermandad de Caballeros de San Fernando estuvo representada por don José Juan Carrión Rangel y don José Antonio Dávila y García Miranda acudió como miembro de la Ilustre Comunidad Mozárabe de Toledo. El Solar hermano de Valdeosera estuvo representado por don Fidel y don José Ramón Fernández de Tejada y Sánchez-Mármol. 
Tras de la Comunión, se rezó un responso en memoria de los descendientes del linaje difuntos, en la Capilla de Santiago el Mayor (cuyo altar preside un famosísimo fresco, obra de José María Casado del Alisal, representado al Apóstol en la batalla de Clavijo), finalizando el Santo Sacrificio con el canto de la Salve Regina a Nuestra Señora bajo la advocación de la Virgen de Tómalos.
Seguidamente, los asistentes se trasladaron a la sede madrileña del Centro Riojano, donde, a las 20 horas, y bajo la presidencia de la Alcaldesa, doña María Ángel Quesada, pronunció unas palabras el asesor nobiliario y señor divisero de Tejada don José Luis Sampedro Escolar quien, en su alocución, trazó una sucinta panorámica de los acontecimientos históricos en los que se encuadró el reconocimiento de los privilegios contenidos en la Carta de Enrique IV de Castilla en 1460.
Concluyeron los actos de este día con una amena y distendida reunión celebrada en uno de los salones del Centro Riojano.
Al igual que ayer, hoy se desea llamar su atención, improbable lector, sobre una composición heráldica realizada por el colegio de armas de Inglaterra en nombre de su soberana, la reina Isabel II.
Se trata de otra concesión de armas nuevas a favor del creado en 2004, I barón George, I y único, don Edward Alan John George, quien había sido armado caballero previamente a través de su acceso a la orden del Imperio británico en el año 2000.
Así, el campo del escudo es un palado de cuatro, de oro y plata, que representa las columnas del debe y del haber de un libro diario, propio del ejercicio de la contabilidad.
Estos bastones dancetados sugieren gráficamente, de forma muy acertada, los gráficos de crédito y débito propios de una entidad bancaria.
Las mariposas que soportan el escudo son representación de una especie endémica del Reino Unido denominada Vanessid (su taxonomía es Polygonia c-album). Manifiestan un simpático gesto de cariño hacia la esposa del nuevo barón, llamada Vanessa.
Hoy se desea llamar su atención, improbable lector, sobre unas armerías que, convendrá conmigo, demuestran un notable ingenio en su diseño. Se trata de la composición heráldica otorgada por el envidiable 
El principal motivo de ennoblecimiento proviene de su acertada y eficaz gestión al frente de la dirección del Real colegio galés de música y drama. Y ese motivo es el que se ha reflejado con absoluta propiedad en sus nuevas armas:
Según expone el propio colegio heráldico en la página de la 
Figura que recuerda muy vivamente el patio de butacas de un teatro. Se ha añadido además un palo de gules, perfilado de plata, que representa el pasillo central de acceso a las localidades, alfombrado de rojo.
El conjunto heráldico se podría blasonar como un campo de gules, papelonado de oro, cargado de un palo de gules, perfilado de plata, con cimera representando un ciervo saliente de gules, que soporta un arpa de oro. Sostenido el conjunto por dos dragones contornados de gules, acollarados, coronados y encadenados de oro.
Hoy únicamente se proponen algunas notas:
Al contrario que lo reseñado en la entrada anterior en la que se exponía la pérdida de entidad del Senado español como cámara en la que albergar a los representantes de la más alta nobleza, los grandes, y la jerarquía de la Iglesia, el sistema bicameral británico sí ha sabido mantener esa tradición, otorgando parte de la responsabilidad legislativa a una cámara alta integrada exclusivamente por nobles y eclesiásticos.
Como sabe, improbable lector, el senado de Londres se denomina cámara de los lores. En él se integraban, hasta la reciente reforma de 1999, la totalidad de los denominados pares, en inglés peers, que vendrían a ser lo que en estos reinos llamamos grandes de España. Desde esa fecha, tan solo noventa y dos, del total de setecientos cincuenta y nueve, mantienen su escaño en la cámara.
Sin conexión directa con lo anterior se reseña esta apostilla: En el Reino Unido, al igual que en España, el concepto de nobleza pretende ser un acicate social para el desarrollo de la nación.
Así, como se ha expuesto en alguna ocasión, el ennoblecimiento pretende ser, no solo el justo premio a un excepcional esfuerzo a favor de la comunidad, sino también un modelo de recorrido vital que sirva de ejemplo para animar las conductas individuales hacia el bien común. El sistema puede considerarse análogo al que la Iglesia propone al elevar a la santidad a algún individuo: presentar un ejemplo de conducta vital.
No obstante lo anterior, el sistema premial británico difiere en algunos puntos esenciales del español: En el Reino Unido se ennoblece con prodigalidad, no en vano la nómina de nuevos nobles crece notablemente cada año, pero se trata de un ennoblecimiento pasajero toda vez que el título se otorga invariablemente de forma vitalicia, no hereditaria.
Cabe interponer contra esa extraña costumbre un argumento evidente. Si al crear un noble se pretende que su recorrido vital sirva como ejemplo a través del tiempo, difícilmente se logrará el objetivo si el título desaparece en la primera generación.
Por otro lado, para concluir esta deslavazada entrada, se recuerda que el acceso a la nobleza en el Reino Unido, como ocurriera en su día en España, otorga el ingreso en la cámara alta, la cámara de los lores, con lo que se consigue que los individuos más capaces de la sociedad intervengan en la elaboración y corrección de las leyes, cuya aplicación afectará a la comunidad nacional en su conjunto.
Manteniendo el argumento iniciado con la reflexión sobre el origen de las guerras carlistas y continuado con la relación de títulos que recibieron los hijos de la reina María Cristina y del I duque de Riánsares, hoy se propone un esbozo sobre la composición original de la denominada cámara alta, el Senado.
Fue la reina gobernadora quien, en 1834, accediendo a lo que demandaba el bando liberal, reformó las cortes españolas creando lo que hoy conocemos como Senado.
Copia evidente del sistema bicameral inglés de la época, 
se diferenciaron las cortes españolas dando cabida en la cámara alta a los llamados próceres, esto es, los hijos de los reyes, los obispos de la Iglesia y los grandes y títulos de España; lo que habían sido realmente hasta entonces las cortes.
En la cámara baja se integró a los representantes del pueblo, que ciertamente no eran tales toda vez que el sufragio electoral era restringido en función de la renta personal.
La configuración de la cámara alta, en la que se veían representados únicamente los más altos niveles de la sociedad, se mantuvo hasta 1931. No en vano los reyes, cuando debían visitar las cortes, lo hacían invariablemente al Senado, evitando el contacto con la cámara baja.
Así, hasta el infausto 1931, era costumbre que el rey acudiera, acompañado de la real familia, a la inauguración del curso legislativo a la plaza de la Marina Española, sede del Senado entonces como hoy.
Concluir reseñando que tanto con la llegada del nuevo régimen instaurado por el general Franco, como en el sistema democrático actual, el Senado ha perdido su configuración original de cámara de los nobles y de la Iglesia, convirtiendose en un órgano colegislativo al que acceden los representantes del pueblo en razón de un criterio exclusivamente regional. 
