Hoy se propone una visita virtual a algunas de las
micronaciones que pretenden una independencia de una superior entidad estatal. Anhelo de soberanía e independencia a menudo anacrónico, las más de las veces ajeno al rigor histórico y casi siempre exento de fundamento. Muy bien se podrían definir como
naciones de fantasía.
Una región cualquiera del globo, para alcanzar una pretendida independencia respecto del Estado al que pertenece, requiere del reconocimiento de otros entes soberanos, de otros Estados. Es decir, no se alcanza la soberanía por la simple declaración de independencia sino que, entre otros requisitos, es necesario que el resto de países, previamente admitidos como tales en el concierto internacional, reconozcan la autoridad del gobierno creado sobre el territorio segregado.
Solo destacaré estos ejemplos de los muchos que pueblan la red.
EL PRINCIPADO DE SEBORGA
Fue realmente un principado independiente en esa amalgama de naciones que posteriormente dio origen a lo que hoy llamamos Italia, si bien en 1729 perdió su condición de país al ser absorbido por el reino de Cerdeña.
En el año 1960, amparado en una supuesta indefinición legislativa, tanto del congreso de Viena, como de los documentos fundacionales del reino de Italia, se recreó el Estado independiente en forma de principado. Cuenta con una supuesta constitución propia y un príncipe electo. Naturalmente no es reconocido ni por la nación italiana ni por ningún otro Estado europeo.
Su atractiva orografía montañosa y su cercanía a otros centros internacionales de ocio como el principado de Mónaco o la ciudad francesa de Niza, han hecho que desde su reciente declaración de independencia se haya visto convertido en un destino turístico de masas. Ésta es su bandera:
Sus armas, recreación de las que efectivamente ostentó el principado, recuerdan muy vivamente a las del reino de Grecia.
En la fotografía que sigue aparece la sede del palacio de gobierno.
Por último una animación virtual de la situación geográfica del principado y de su escarpada orografía.
El principado de Seborga cuenta con una
página propia en wikipedia.
EL PRINCIPADO DE NAVAZA
Situado en una isla deshabitada del mar caribe muy cercana a la costa de Haití, argumenta su deseo secesionista en la supuesta capacidad de autodeterminación de los pueblos. Mantiene un par de páginas en la red
ésta y
ésta otra. Sus armas son las que aparecen a continuación:
Ésta es su bandera:
EL REINO DE TAVOLARA
Amparado en el reconocimiento cierto de los reyes de Italia, esta isla aun reclama su condición internacional de reino independiente, olvidando que el último monarca efectivo del lugar cedió, en 1886, sus derechos soberanos a la nación italiana.
Sus elegantes armas, que son las propias de la familia Bertoleoni, dinastía reinante en aquella isla, son estas:
Un descendiente de los reyes del lugar mantiene vigente su deseo
independentista.
EL REINO DE REDONDA
Las circunstancias históricas de esta isla del mar caribe han sido peculiares. La reina Victoria I de Inglaterra reconoció su independencia imponiendo la condición de mantener la alianza con su reino.
Por avatares del destino el actual soberano de aquel territorio deshabitado es el escritor español Javier Marías, hijo del filósofo y también escritor Julián Marías, que ha hecho de su monarquía un muy digno enclave literario.
Ejerciendo su prerrogativa de
fons honorum, el rey Javier I ha concedido un buen número de títulos de nobleza que sirven como premio a insignes escritores y cineastas. En
esta página podrá encontrar, improbable lector, la lista de los ducados concedidos hasta la fecha. Sus armas son estas: