Como se expuso en las entradas de los días tres y seis de noviembre del pasado año, es propio de las casas reales brisar las armas del titular con el fin de evitar la duplicidad armera. Duplicidad que en cualquier caso ocurre siempre con las armas del rey y del reino. Aquí y en los países de nuestro entorno. Se adjuntan las armas de los herederos de los reinos de España y Portugal, ambas brisadas con lambel.
Por el contrario, en el caso de armas familiares en España, no solo no es necesario sino que es del todo inconveniente brisar las armas del titular de un linaje. En estos reinos, en España, como se expuso en otras entradas de esta bitácora, el escudo denota solamente la pertenencia a una familia, a un linaje. El difunto rey de armas don Vicente de Cadenas y Vicent, así lo expresó en un artículo de su revista Hidalguía: "El escudo, en España, es la expresión gráfica del apellido, de la pertenencia a un linaje".
En otro lugar de la misma página,
http://www.armoria.info/, encontrará un par de artículos más sobre diferentes aspectos heráldicos