viernes, 26 de octubre de 2007

CARBAJOSA DE LA SAGRADA

El escudo que aparece tras estas líneas es del pueblo salmantino, del antiguo reino de León, Carbajosa de la Sagrada. En la explicación que el propio ayuntamiento ha incluido en la red, se detalla que el escudo entero es parlante. Esto significa que la vista atenta del escudo recordará al nombre del lugar. Los carbayos: Carbajosa. Muy bien. Pero que el sombrero de peregrino con borlas, con tres borlas y de color negro, recuerde a ¿sagrada? ¿por qué?

Se ha considerado como parlante del término sagrada un timbre heráldico que se refiere a un sacerdote que está destinado en una catedral. Quiero decir que un capelo con tres borlas, en dos órdenes y de color negro, significa en heráldica que el individuo que lo ostenta es un sacerdote destinado en la catedral del lugar y que se denomina canónigo ¿A alguien le recuerda esto al término sagrada?

martes, 23 de octubre de 2007

ARMAS DE PUERTO DE LA CRUZ EN TENERIFE

Ya se habló en este blog de monseñor Bruno Bernard Heim, arzobispo titular de Xanthús, nuncio de su santidad. Fue el arzobispo que diseñó las armas de los cuatro últimos papas difuntos. Pero este arzobispo, de feliz memoria, no solo diseñó armas relacionadas con la Iglesia. Uno de sus más equilibrados escudos es el que se pospone a estas lineas y que pertenece a la ciudad tinerfeña de Puerto de la Cruz, en el norte de la isla.
Fue diseñado por Monseñor Heim, toda vez que, consecuencia de la amistad con un compatriota suyo suizo, nacionalizado posteriormente español y dueño de un hotel en la costa de la ciudad, fue invitado a organizar las armas del municipio. Son estas:
Copio, de la página turística del ayuntamiento de la ciudad, la descripción que hace de las armas del municipio:

"En el centro, el dragón de sinople linguado de gules, mítico guardián del Jardín de las Hespérides, más allá de las columnas de Hércules, el Edén de las tres Ninfas de Oro; sobre sus lomos, la cruz latina de gules, la cruz del Puerto que contempla su nombre y sus tradiciones; bajo las garras de aquel la acompaña de azul y tres fajas ondeadas de plata, las ondas navegantes raíces de la ciudad como medio de comercio y expansión; superpuesta, la llave de sable que abre el camino a las rutas de las indias; al timbre, la corona reflejo de la monarquía de los Reyes Católicos."

ARMAS DE LA CIUDAD DE TELDE

El archipiélago canario cuenta con dos obispos ordinarios: Uno en Las Palmas, que recibe el nombre de obispo canariense y otro en la ciudad de La Laguna, realmente San Cristobal de la Laguna, en Tenerife, que recibe el nombre de obispo nivariense.

Este escudo que acaba de observar, lector, es de la ciudad de Telde. Esta ciudad se encuentra en la costa oriental, prácticamente la única habitada, de la isla de Gran Canaria. A unos veinticinco kilómetros de Las Palmas.

El báculo del primer cuartel representa que esta ciudad fue la primera del archipiélago en contar con sede episcopal. Aún antes de la conquista castellana. Ocurrió que una serie de frailes mallorquines se establecieron en Telde en el siglo XIV. Así lo atestigua la bula del papa Clemente VI de 1351, que creó la sede episcopal. Según cuentan las crónicas, estos misioneros fueron con el tiempo odiados por los canarios, bien porque los asociaban con los esclavistas que saqueaban las costas, bien por motivos de otra índole; lo cierto es que a finales de dicho siglo XIV, los aborígenes arrojaron a los misioneros por un acantilado.

La llave que acompaña al sol canario indica que, al ser la primera sede episcopal, fue consecuentemente la primera ciudad del archipiélago.

Así, dicha sede existe hoy, pero con obispo titular, es decir con un obispo que, por trabajar en algún lugar de la curia vaticana o en alguna nunciatura, en lugar en cualquier caso distinto de la ciudad que da nombre a su título, no es ordinario sino titular, es decir no residente en Telde.

El castillo de plata que se representa en el segundo cuartel, y que no indica otra cosa que su pertenencia al reino de Castilla, a pesar de ser de plata y no de oro, recuerda vivamente el “torreón de Gando”, construcción de tiempos inmediatamente posteriores a los de la conquista castellana y que hoy se encuentra situada dentro del perímetro de la base aérea de Gando, en Telde, donde el autor de estas líneas desarrolló su labor militar durante algo más de tres años.

AGRADECIMIENTO A DON ALFONSO RIOBO

Desde hace algo más de un año tengo el honor de tener por confesor al sacerdote don Alfonso Riobó, hombre de esclarecida inteligencia y más que probada comprensión, de la prelatura del Opus Dei. Casualmente es hijo, desgraciadamente ya huérfano, del general Riobó, que fue General de Brigada Médico, Director del Hospital Militar “Gómez-Ulla”, unidad en la que estoy destinado.
En agradecimiento a su dedicación y buen hacer, publico aquí sus armas:

REY DE ARMAS


Los reyes de armas, si es que alguien que se atreve con este blog lo ignora, eran en la edad media los encargados de las anotaciones de los escudos de los caballeros que participaban en un torneo, la ordenación de las grandes ceremonias y de llevar los registros de la nobleza de la nación.
Posteriormente, en España, y hasta el reinado de Alfonso XIII, ojo que se habla de fecha tan reciente como 1931, furon los encargados del conocimiento y ordenación de los blasones de las familias que los solicitaran.Porque , como sabrá, improbable lector, en España no es necesario ser noble, ni hidalgo, ni nada de nada para solicitar el reconocimiento de un escudo propio. Lo único imprescindible es que no lo use otro individuo u otra familia.
En España, actualmente, existen varios cronistas de armas:
El mas conocido es el actual marqués de la Floresta, don Alfonso de Ceballos-Escalera y Gila, que lo es de Castilla y León, toda vez que se considera cedida a las Comunidades Autónomas la materia heráldica. Este Rey de Armas, posee un curriculum vitae absolutamente deslumbrante. Estas son sus armas:Lo que se añade a continuación, es una certificación de armas que ha sido realizada por este rey de armas. Se trata de la certificación de armas al, entonces recien creado, Conde de Latores, grande de España, el Teniente General, del Cuerpo de Intervención Militar, don Sabino Fernández Campo, durante muchos años jefe de la casa de su Majestad el rey actual, don Juan Carlos I, felizmente reinante:

Como se puede observar, debajo del escudo se aprecia con nitidez el refrendo del rey don Juan Carlos.
Dicha certificación la he obtenido de esta excelente página: http://heraldry.freeservers.com/certificates.html
Añadir, por último, que si algún improbable lector de estas líneas se ve en la necesidad de solicitar un reconocimiento institucional armero, si desea crear para sí mismo armas nuevas que entregar a sus descendientes como legado de buen tono, con el respaldo de un auténtico rey de armas, en la red puede encontrar la dirección del despacho de trabajo de este rey de armas. En esta página encontrará, lector, a dónde dirigirse: http://www.cronistas.net/, pinchando en el enlace llamado Autoridades Heráldicas.

domingo, 21 de octubre de 2007

MONSEÑOR DONALD WUERL

Ya se habló en este espacio del arzobispo de Washington, monseñor Donald Wuerl y se expusieron sus armas. Es el obispo que aparece en la fotografía siguiente y que recibe un báculo adornado con sus propias armas.

Como recordará, improbable lector, se explicó que este arzobispo no timbra sus armas con capelo, o al menos inicialmente, tras alcanzar la ordenación episcopal, no lo hizo, sino que se limitó a acolar tras sus armas una cruz procesional como indicativo de su pertenencia al orden episcopal. Y es que eso es lo que determina en un escudo si el individuo que lo ostenta es obispo.

Las armas de este arzobispo se diseñaron por otro arzobispo del que también se habló en este espacio, monseñor Bruno Bernard Heim, de feliz memoria. Se trata del individuo que diseñó las armas de los cuatro últimos papas, como ya se explicó.

Monseñor Wuerl, partió inicialmente sus armas con las de la diócesis de la que era ordinario, Pittsburg, según costumbre de la conferencia episcopal de Estados Unidos. Estas son las armas de la diócesis de Pittsburg:

Quedando sus armas, mientras fue arzobispo de aquella sede y sin timbrar con capelo:

Pero desde hace un año, monseñor Wuerl, abandonó la sede de Pittsburg para trasladarse a ejercer como pastor de la diócesis de Washington. Allí, de nuevo, partió sus armas con las de su nueva archidiócesis. Y comenzó a timbrar sus armas con el capelo que le era propio por consagración, quedando desde entonces sus armas:

Pues bien, este arzobispo, y contra todo pronostico, no ha sido nombrado cardenal por el Papa Benedicto XVI, que Dios guarde, a pesar de que, tradicionalmente, la diócesis de la que es ordinario ha sido agraciada con el cardenalato.

Sí ha sido, en cambio, y contra todo pronostico, elevado a la púrpura de los príncipes el arzobispo de Galveston-Houston, monseñor di Nardo, cuyas armas, parlantes y de diseño lógico, fueron creadas en su día por una monja norteamericana. Estas armas, están partidas a las de la diócesis del nuevo cardenal. La monja es autora de otros escudos que demuestran, en cambio, su ausencia de rigor heráldico.

He aquí las armas de Monseñor di Nardo: